Introducción

La enseñanza de neonatología es uno de los factores que más influye en el avance, progreso y mejora del cuidado de recién nacidos enfermos internados en la unidad de cuidado intensivo neonatal (UCIN).

La importancia de la educación para el crecimiento personal y profesional es evidente en todas las regiones del mundo. Pero cuando se piensa en su impacto en la mejora de la sobrevida y de la calidad de vida del inmenso número de recién nacidos enfermos que requieren cuidados especiales cada año en Latinoamérica, las repercusiones positivas de la enseñanza en la neonatología son infinitas.

Todos somos ignorantes, pero no todos ignoramos las mismas cosas. La ignorancia no tiene nada de malo, salvo cuando no quiere ser superada. La ignorancia en neonatología puede y debe ser superada a través de la educación, utilizando estrategias de enseñanza de excelencia en forma metódica y continua.

Todos cometemos errores. Se sostiene que errar es humano. Pero la enseñanza en la neonatología es clave para reconocer el error y así no seguir repitiendo el mismo error una y otra vez.

Todos somos ignorantes y todos cometemos errores. Pero cuando nos enseñan y aprendemos con sensibilidad y corazón somos cada vez mejores. Y cuidamos mejor a los recién nacidos enfermos.

Pilares en la enseñanza de la neonatología.

Hay varios pilares fundamentales en la enseñanza de la neonatología. Entre ellos se encuentran:

1. Aprender a hacer

Hay muchos procedimientos que son esenciales para el cuidado adecuado de recién nacidos enfermos. La enseñanza de estos procedimientos requiere no sólo información teórica, sino que también son necesarias las actividades prácticas. Estas se brindan en talleres, con simulación, y también en la práctica clínica en la sala de partos y en la unidad de cuidados intensivos (UCIN). En toda UCIN debe haber profesionales capacitados que puedan realizar en forma oportuna los procedimientos las 24 horas de cada día para cada recién nacido en el momento que lo requiera.

2. Aprender a conocer

Es decir, enseñar a adquirir conocimiento. Esto facilita la comprensión, el desarrollo y la mejora continua del potencial profesional y la comunicación de manera efectiva dentro de un ambiente muy complejo como lo es cada UCIN.

3. Aprender la convivencia

Este es otro desafío en la enseñanza de la neonatología. En las UCIN, para el logro de la continuidad en los cuidados, se requiere trabajo en equipo y compromiso con dedicación. Esto requiere la enseñanza del respeto y de la ética profesional y también del cuidado con empatía de las madres y familiares de los recién nacidos enfermos.

4. Aprender a comunicar

Es fundamental este pilar. Comunicación de los profesionales entre sí y de los agentes de salud neonatal con la madre y los familiares. Se requiere enseñanza para el aprendizaje de acompañar y para poder dar malas noticias.

5. Aprender sobre las múltiples condiciones que pueden afectar a los recién nacidos

Esto requiere de la enseñanza teórica y de la lectura de mucho material bibliográfico, preferentemente de alta calidad.

6. Aprender sobre la seguridad y la efectividad de tratamientos disponibles

La enseñanza de este tema esencial en neonatología conduce a no utilizar tratamientos sin indicación precisa. También conduce a que se reduzca la existencia de iatrogenia en las UCIN. Es decir, a que se indiquen los medicamentos más seguros y con menos riesgos y a utilizarlos por el período más breve posible.   

7. Aprender a ser

Este aprendizaje, a través de la educación en neonatología, es muy útil para el crecimiento los agentes de salud neonatal. De esta manera cada uno de ellos, de a uno cada vez, mejorará su propio pensamiento y desarrollará un juicio crítico con autocrítica. Esto le permitirá evaluar principios, evaluar acciones individualizadas para cada bebé y para no seguir “normas” porque así se hace aquí. El aprender y el saber rompen las cadenas de la dependencia y hacen desaparecer el actuar en forma automática, sin reflexionar. Al decir de Machado “es propio de los hombres de cabezas medianas embestir contra todo aquellos que no les cabe en la cabeza”. Yo me pregunto ¿cómo es el corazón de los agentes de salud neonatal que se oponen a agrandar su cabeza y a darle la bienvenida a la enseñanza de alta calidad en neonatología?

La UCIN es un lugar de riesgo, hasta podría decirse peligroso. Y esto no es por causa de los que hacen el mal, sino por aquellos que no hacen nada por evitarlo y mejorarlo.

¿Quién enseña a los que enseñan? Educación y educadores en la neonatología?

Es una pregunta que debe tenerse presente para que los que enseñen temas de neonatología lo hagan siempre a conciencia, con mucho respeto e inspirando a otros.

Al respecto de los educadores, William Arthur Ward dijo: “El educador mediocre habla. El buen educador explica. El educador superior demuestra. El gran educador inspira”.

La enseñanza en neonatología tiene que inspirar a otros. Un buen educador no impone, sino libera; no tira de nadie, sino levanta; no aplasta ni debilita; no dicta, sino enseña; no exige, sino que pregunta y colabora; no inhibe, sino que estimula; crece ayudando a crecer a otros y sigue aprendiendo al enseñar. Un educador así vivirá muchos instantes inspiradores con los recién nacidos.

La enseñanza en neonatología tiene que ser altruista y generosa. El conocimiento no tiene propietarios ni sabe de egoísmos y, por lo tanto, ningún conocimiento puede ni debe ser guardado para uno mismo. Al enseñar se difunde el conocimiento, lo que debe hacerse con ética, sin plagios ni fraudes o robos. Al educar a otros, siempre hay que dar crédito donde el crédito es merecido y no hacer pasar como propio lo que no lo es. 

Mandela ha sostenido que “la educación es el arma más poderosa que se puede utilizar para cambiar el mundo”.  Paulo Freire dijo: “La educación no cambia al mundo, cambia a las personas que cambiarán al mundo”. Parafraseándolo, podemos decir que la educación en la neonatología no cambia a la Patria Neonatal, pero cambia a los agentes de salud que mejorarán la vida y la calidad de vida en la Patria Neonatal. 

Resumen y conclusión

Todos los problemas que dificultan la mejora continua de la salud neonatal son problemas de educación en la neonatología. Con buena enseñanza en neonatología se mejora la vida de muchos. Los agentes de salud neonatal con más aprendizaje tendrán más y mejores condiciones y habilidades para brindar cada vez mejores cuidados a los recién nacidos enfermos, a sus madres y a sus familias.  

Además, es necesario que existan profesionales de la salud neonatal capacitados y comprometidos con formar a las nuevas generaciones en un contexto de cambio como sucede en las UCIN.

En conclusión, la enseñanza de alta calidad en la neonatología permite evitar prácticas clínicas erróneas cuando estas son conocidas y la repetición de errores. También logra acabar de raíz con muchos de los problemas que existen en los cuidados de recién nacidos enfermos en la UCIN. Así se logra disminuir la mortalidad y morbilidad de muchísimos recién nacidos muy frágiles.

Fotografía: De Evan-Amos via Wikimedia Commons